Se dice habitualmente que “las palabras mueven, pero el ejemplo arrastra”. Soy un convencido de que esta frase es verdad, especialmente cuando hablamos de valores, moral e integridad. Sin embargo, muchas veces hacemos mucho hincapié en como detectar situaciones o comportamientos de falta de integridad. O trabajamos, en las distintas universidades, en como impulsar la denuncia por parte de los estudiantes y crear una cultura de integridad. Todo esto está bien y claro que hay que seguir haciéndolo. Aún así, poco ponemos el foco en fomentar la integridad y responsabilidad en los docentes.
Asumimos que por el hecho de ser docentes ya van a ser íntegros, responsables y honestos, y la mayoría a si lo son y no tengo duda. Además, en las grandes cuestiones éticas tenemos claro cuál debe ser nuestro actuar como docentes. Es decir, todos sabemos que, si un estudiante nos ofrece algo a cambio de modificar una calificación, no es correcto. Ahí no hay dilema, el dilema ético real surge cuando hay que tomar una decisión entre dos opciones aparentemente positivas o que plantean un conflicto de valores.
Por otro lado, como docentes no dejamos de ser objeto de observación por nuestros estudiantes. Para bien o para mal, lo que hacemos o dejamos de hacer, tanto dentro, como fuera del aula, es observado y en algunos casos analizado y juzgado, por los estudiantes que nos observen. De tal modo, que la manera en la que como docentes afrontamos las responsabilidades propias de nuestra labor docente, así como nuestro actuar frente a los casos de falta de integridad de nuestros alumnos, impacta en la cultura de integridad de la institución y en los comportamientos de los estudiantes.
Por ejemplo, según Cabrera-Gala y Cavazos (2023), algunos profesores prefieren no reportar los casos de falta de integridad de los alumnos y resolverlo por su cuenta. Cuando esto se da y si las medidas adoptadas por el maestro no se consideran suficientemente estrictas, da pie a un relajamiento por parte de los estudiantes en cuanto a la honestidad académica.
Por otro lado, Casado et al. (2018) consideran qué “Es necesario fomentar en los estudiantes la cultura del esfuerzo, del rigor científico, de la curiosidad intelectual, de la participación en la vida académica y en la sociedad, y del respeto propio y ajeno” (p. 49). Pero ninguna de las acciones que implementemos tendrá éxito si no somos los propios docentes quiénes vivimos esa cultura de esfuerzo, rigor y curiosidad. DiPaulo (2022) recoge como “Anderman et al. (2010) encontraron que cuando los estudiantes percibieron al profesor como creíble, esta variable redujo significativamente el compromiso impulsivo de los estudiantes en la deshonestidad académica” (p. 3).
Por tanto, como docentes debemos reflexionar sobre nuestro actuar profesional en las distintas dimensiones y roles que tenemos dentro de la Universidad y fomentar una cultura de ética profesional y responsabilidad.
Referencias
Cabrera-Gala, R. y Cavazos, J. (2023). La integridad académica del profesor: el camino hacia una reputación positiva (17). A&H, Revista de Artes, Humanidades y Ciencias Sociales. 50-82.
Casado, M., Martínez, M., Neves, M.do C. P., Ayuste, A., Badia, A., Buxarrais, M. R., Carrio, A., Corcoy, M., Esteban, F., Font, A., Gual, A., Gómez, S., Hogan, P., Lecuona, I. de, Leyton, F., López Baroni, M.J., Marfany, G., Payà, M., Puig, J.M., Radeva, P., Román, B., Royes, A., Santaló, J., Tey, A., Trilla, J., & Viader, M. (2018). Declaración sobre ética e integridad en la docencia universitaria. FEM: Revista de la Fundación Educación Médica, 21(2), 65-74. https://dx.doi.org/10.33588/fem.212.941
DiPaulo, D. (2022) Do preservice teachers cheat in college, too? A quantitative study of academic integrity among preservice teachers. International Journal for Educational Integrity 18, 2 https://doi.org/10.1007/s40979-021-00097-3
Universidad de Deusto (2022). ¿Qué es un dilema ético? | Ejemplo con un coche autónomo. Universidad de Deusto, Disponible a https://www.youtube.com/watch?v=HgIkHfouAsw
Las opiniones del autor son propias.
Gracias por ser miembro de ICAI. ¿Aún no eres miembro de ICAI? Consulte los beneficios de la membresía en https://academicintegrity.org/"mailto:info@academicintegrity.org." target="_blank" rel="noopener">info@academicintegrity.org. ¡Se parte de algo genial!